sábado, 8 de diciembre de 2012

Resumen de los capítulos del libro de PAUL M. SWEEZY

Realizado por : 
Raquel García Díaz
Raquel García Morales
Susana García Romero
Virginia Pérez Moreno


Sweezy critica el sistema económico actual en la medida en que no llega adaptarse a un patrón hecho de conceptos que carecen totalmente de contenido social, esto se ejemplifica en el caso del obrero que es explotado si recibe por salario menos que el valor del producto físico marginal de su trabajo. Estos conceptos los toma del lenguaje corriente, les extrae el contenido social y las categorías universales que resultan y los aplica indistintamente a toda clase de sistemas económicos. Parece que de esta forma el economista elude una exploración sistemática de aquellas relaciones sociales tan universalmente consideradas como concernientes a los problemas económicos, que están hondamente encajadas en el lenguaje cotidiano del mundo de los negocios.
Por último hay que destacar que existen deficiencias de la economía política moderna en cuanto a ser una verdadera ciencia social de las relaciones humanas, por ello hay inconformidad con eso y habrá que explorar otra manera de emprender el estudio de los problemas económicos, de aquí se asociará el nombre de Karl Marx.
1. EL MÉTODO DE MARX:
Marx analiza la realidad mediante un método básicamente histórico. Ya que para él, la realidad social no es el proceso de cambio inherente a un juego de relaciones determinado, es el proceso histórico. Los sistemas sociales como los individuos, recorren un ciclo de vida y abandonan la escena cuando las formas de desarrollo de las fuerzas productivas se convierten en su problema. Por lo tanto, el proceso del cambio social, no es puramente mecánico, sino que es el producto de la acción humana limitada en forma precisa por la clase de sociedad. Asimismo, del capitalismo se puede entender y criticar lo que pasa dentro del marco del sistema, pero no se puede entender ni evaluar lo que le pasa al sistema.
Marx, al aceptar la trayectoria de la Rhenische Zeitung, entró en contacto con nuevas ideas sociales provenientes de la ciencia del derecho y la filosofía, además de conectar con ideas socialistas y comunistas, se involucró al estudio intenso del socialismo y del comunismo. Para Marx, su principal preocupación, era la sociedad en su conjunto, y sobre todo el proceso del cambio social. Siendo de gran importancia la economía política, ya que en su esfera se encuentra el ímpetu del cambio social. Marx no trataba de reducirlo todo a términos económicos, sino que intentaba buscar la verdadera interrelación de los factores económicos y no económicos en el conjunto social, desenmascarando así la ley económica del movimiento de la sociedad moderna.
Sweezy destaca también cómo Marx utiliza aquellos elementos del pensamiento de Hegel que hacían énfasis en el proceso y desarrollo a través del conflicto entre fuerzas opuestas y en cómo siguió con los conflictos históricos decisivos hasta sus raíces en el modo de producción, hasta descubrir lo que llamó conflictos de clase.
En cuanto a la validez de las leyes o tendencias en el volumen I de “El Capital” de Marx es relativa al nivel de abstracción en el cual han sido derivadas y en la medida de las modificaciones que deban sufrir cuando el análisis se lleva a un nivel más concreto. Gran número de críticas hechas a la economía política de Marx, están basadas consciente o inconscientemente. En cuanto a los resultados obtenidos de esta abstracción, tienen un carácter provisional, por lo tanto su validez es relativa al nivel de abstracción en el cual han sido derivadas y en la medida de las modificaciones que deban sufrir cuando el análisis se lleva a un nivel más concreto. Una abstracción apropiada debe responder a estas tres cuestiones: ¿Están hechas con la debida consideración del problema que se estudia?, ¿Eliminan los elementos no esenciales del problema? y ¿Se abstienen de eliminar los elementos esenciales?


2. EL PROBLEMA DEL VALOR CUALITATIVO:

Sweezy habla de la mercancía como todo lo que se produce más para el cambio que para uso del productor, por ello el estudio de las mercancías es el estudio de la relación económica del cambio. Por otro lado, el cambio, es anterior a la división del trabajo y causa de ella, la producción de mercancías es la forma inevitable de vida económica, aunque luego se contradice esta premisa, diciendo que la producción de mercancías es una forma histórica condicionada y que de ningún modo puede presentarse como manifestación directa del hombre.
En contraposición, para Adam Smith el origen de todo es el aumento en la productividad es la división del trabajo, siendo Smith incapaz de concebir la división del trabajo independientemente del cambio.
Para el autor, la forma universal e inevitable de la vida económica es la producción de mercancías, que tiene sus raíces en la naturaleza humana, siendo la ciencia económica es la ciencia de la producción de mercancías. Marx no niega la existencia de una relación entre la producción de mercancías y la división del trabajo, pero no se trata de ningún modo de la firme y rígida relación que describe Smith. Para Marx, los productos frutos del trabajo, sólo pueden convertirse en mercancías, los unos con relación a los otros, como fruto de diferentes clases de trabajo. Por eso los economistas deben dirigir su mirada al carácter de las relaciones sociales subyacentes en la forma de mercancía, las tareas de la economía políticas no son sólo cuantitativas sino también cualitativas. 
Sweezy destaca que el valor de uso no da una mercancía ningún carácter peculiar, este valor expresa cierta relación entre el consumidor y el objeto consumido, sin embargo algunos piensan que éste estaba excluido por Marx en sus investigaciones ya que no daba cuerpo directamente a la relación social, pero el autor hace hincapié en que esto no es así, ya que este es un prerrequisito del consumo y Marx no lo excluyó de su estudio. Para Sweezy, dentro del valor de cambio, existe un valor que yace oculto. Por eso, el trabajo abstracto, representado por el valor de las mercancías, es un concepto importante en el pensamiento marxista, esta expresión equivale a lo que es común a toda actividad productiva.
En cuanto a la materialización de las relaciones sociales, hay que señalar su profunda influencia en el pensamiento económico tradicional, ya que las categorías de la economía capitalista han sido consideradas como si fueran inevitables categorías de la vida económica general. Entonces, no se puede negar que algunos rasgos son comunes a todas las formas de economía social o sistemas económicos sociales. No obstante incluirlas todas éstas en un solo juego de categorías e ignorar sus diferencias específicas, sería como una negación de la historia.
No hay que olvidar que los únicos que se preocupan en poner al descubierto las relaciones sociales subyacentes en las formas de producción de mercancías son los críticos del orden social como Marx. En una sociedad capitalista, los individuos, como propietarios de mercancías, están en un plano de igualdad perfecta, sus relaciones mutuas no son las relaciones entre amo y siervo de un régimen de status personal, sino las relaciones contractuales entre seres humanos, libres e iguales. Sin embargo el obrero no advierte que su falta de acceso a los medios de producción lo obliga a trabajar en condiciones dictadas por aquellos que tienen el monopolio de los medios de producción y que, por lo tanto está siendo explotado para beneficio de otros, igual como el siervo. Por el contrario, el mundo de las mercancías aparece como un mundo de iguales, donde el obrero vende su fuerza y mientras se le pague su verdadero valor, todas las condiciones están satisfechas, es decir se admite la apariencia como verdadera representación de las relaciones sociales.
Entonces, sólo se puede ver con claridad la verdadera estructura capitalista mediante un análisis crítico de la producción de mercancías, un análisis que penetre a través de las formas superficiales de hombre a hombre, donde. Esto hay que tenerlo muy en cuenta, debido a que la producción de mercancías ha ocultado el verdadero carácter de las relaciones sociales a las que da cuerpo, ha creado la racionalidad económica sin la cual un pleno desarrollo de las fuerzas productivas sería imposible. A pesar de esto, no se debe considerar el sistema como un todo planeado y racional, por que existe una creciente irracionalidad en su funcionamiento como un todo.
Para finalizar hay que apuntar que según Marx el capitalismo sería un sistema social que tiene dominio sobre el hombre, lo educa hasta un punto en que es capaz de controlar su propio destino, al mismo tiempo le impide advertir los medios de ejercer el poder que está a su alcance, y desvía de sus energías por cauces puramente destructivos.

3. EL PROBLEMA DEL VALOR CUANTITATIVO

El punto de partida, para Sweezy es que en toda sociedad, es esencial que el trabajo se aplique a la producción y que los productos sean distribuidos entre los miembros de la sociedad, entonces, lo que cambia en el curso de la historia es la forma de organizar y llevar a cabo estas actividades. Para Marx, existe una correspondencia exacta entre las proporciones del cambio y las proporciones del tiempo de trabajo. De esta manera, en la determinación del valor no debe tomarse en cuenta más trabajo que el socialmente necesario, es decir, necesario en las condiciones sociales existentes, con las condiciones normales de producción y con el grado de habilidad medio. Por otro lado, si la diferencia entre dos obreros es por cuestión de entrenamiento, es que el obrero emplea indirectamente una parte del trabajo de sus maestros y no sólo su propio trabajo. En la práctica, estas diferencias pueden ser el resultado de una combinación de diferencias en habilidad y entrenamiento. Para el autor siempre debe existir una relación de cambio estable entre los productos, porque si no se produciría un desequilibrio. Entonces, tanto la oferta como la demanda están equilibradas sólo cuando el precio de cada mercancía sea proporcional al tiempo de trabajo requerido para producirla o a la inversa, se establecerán precios proporcionales a los tiempos de trabajo sólo en caso de que las fuerzas competidoras de la oferta y demanda puedan trabajar libremente, por lo tanto, la teoría de la determinación de los precios por la oferta y la demanda concurrentes, no sólo no contradice la teoría basada en el trabajo, sino que es parte de ella.
Entonces, La relación entre demanda y oferta, explica por una parte las desviaciones de los precios de mercado, y por otra, la tendencia a hacer fluctuar estas desviaciones, es decir a suspender el efecto de la relación de demanda y oferta. Entonces, el precio de mercado de una mercancía coincide con su valor real, en el momento en que oferta y demanda se equilibran mutuamente y cesan de actuar.
En cuanto al valor de uso de las mercancías individuales, el autor apunta que depende de la necesidad particular que cada una satisface, en cambio, el valor de uso de la masa social de productos, depende de la medida en que satisface en cantidad, una necesidad social precisa de cada clase particular de producto. Por lo tanto, la necesidad social, es un factor determinante de la cantidad de trabajo social que deben suministrar las diferentes esferas particulares.

Sweezy dirá que en cuanto a la ley del valor de Marx resume las fuerzas actuantes en una sociedad productora de mercancías que regula, siendo éstas: las proporciones del cambio de mercancías, la cantidad producida de cada una y la asignación de la fuerza de trabajo a las diferentes ramas de la producción. Entonces, una sociedad de productores privados que satisfagan sus necesidades por el cambio entre ellos sería la condición básica para la existencia de una ley del valor. Siendo esta última esencialmente una teoría de equilibrio general desarrollada en primer término con referencias a la producción simple de mercancías y adaptada después al capitalismo. De tal forma que en una sociedad productora de mercancías, no simplemente existe el caos sino que también el orden.
El autor aclarará que a la hora de hablar de precio de monopolio, queremos decir en sentido general un precio determinado sólo por el deseo de adquirir de los compradores y por su solvencia, independientemente del precio, que es determinado por el precio de producción general y por el valor del producto. Por lo tanto, la demanda adquiere una significación especial, ya que el control de la oferta por el monopolista le permite aprovecharse de las condiciones de la demanda. Por otro lado el autor señala que las relaciones de valor cuantitativamente son perturbadas por el monopolio, él cual no altera las relaciones sociales básicas de la producción de mercancías, ni cambia la conmensurabilidad esencial de las mercancías. Entonces podemos seguir midiendo y comparando mercancías y conjuntos de mercancías en términos de unidades de tiempo de trabajo, aún bajo condiciones de monopolio.

4. PLUSVALÍA Y CAPITALISMO:

En este capítulo, el autor comenzará explicando el concepto de capitalismo y todo aquello que le es necesario para que pueda llevarse a cabo, el desarrollo de la producción de mercancías.
Es importante señalar la distinción entre producción de mercancías y capitalismo, puesto que, aunque el capitalismo se base esencialmente en ello, no toda la producción de mercancías implica necesariamente el capitalismo. La diferencia principal del capitalismo se basa en la compra y venta de la fuerza de trabajo, basándose por ello en continuas relaciones de cambio, como bien expuso Marx, se trata de una nueva época en el proceso de producción social. Y es que, en el capitalismo tanto los medios de producción como la fuerza de trabajo son mercancías, por lo que poseen valor de cambio.
Para conocer el origen de la plusvalía, según Marx, es necesario analizar el valor de la mercancía fuerza de trabajo, siendo ésta el trabajo mismo. El capitalista compra la fuerza del trabajo del obrero, es decir, al obrero mismo, quien durante un periodo de horas laborales acordado previamente, recibirá un salario (suma correspondiente al valor de los medios de subsistencia del obrero), a cambio de realizar el trabajo que le sea impuesto.
Dichas horas laborales, traducidas en la jornada de trabajo del obrero, puede dividirse en dos partes; el trabajo necesario y el trabajo excedente. El trabajo necesario es aquel que el obrero intercambia para compensar sus medios de subsistencia, es decir, es el que obtiene el obrero a modo de salario; mientras que el trabajo excedente es aquel que se da una vez cumplido el trabajo necesario, convirtiéndose en plusvalía, y siendo un beneficio perteneciente al capitalista.
También se supone que la tasa de ganancia es igual tanto en las industrias como en las empresas. Si tanto las tasas de plusvalía como las tasas de ganancia son iguales en todas partes, se entiende entonces que, si el cambio de mercancías debe realizarse de acuerdo con la ley del valor, la composición orgánica del capital debe ser igual en todas partes.

5. LA ACUMULACIÓN Y EL EJÉRCITO DE RESERVA.

El capítulo comienza describiendo una teórica situación económica estable y sin acumulación de capital, llamada “Reproducción Simple”. La producción se divide en dos amplias categorías: producción de medios de producción y producción de artículos de consumo, y estos últimos, en otras dos categorías (artículos necesarios para la vida y artículos de lujo). Esto es la oferta total de mercancías. Por otro lado, los ingresos están formados por tres categorías: ingresos que el empresario deberá invertir en medios de producción, plusvalía y el salario. Esto se considera la demanda de mercancías. Para que este sistema sea estable, el capital constante usado debe ser igual a la producción total de la rama de bienes de producción, por lo que el capital usado en la rama de artículos de consumo debe ser igual al valor de las mercancías consumidas por los obreros y capitalistas dedicados a producir medios de producción. Ambas ramas deben interaccionar entre ellas para equilibrar la balanza, cuando el capital variable y las plusvalías de la primera rama sean iguales al capital constante de la segunda, estableciéndose un equilibrio entre la suma de la oferta y la demanda.
Marx introduce en concepto de “ejército de reserva” o “población excedente relativa” para referirse a los obreros desocupados, que mediante su competencia activa en el mercado de trabajo ejercen una presión constante hacia abajo, en el nivel de salarios. El empresario ha podido sustituir empleados por máquinas, para reducir el salario. Por tanto, gran parte de este sector está formado por los que han sido desplazados por las máquinas.
Un estallido de acumulación de capital puede ser el resultado de una apertura de un nuevo mercado o de una nueva industria. Es en estos casos cuando el ejército de reserva se vacía y desaparece el obstáculo que frena el alza de los salarios. Pero en cada período de crisis, eliminación de trabajo… se vuelve a reconstruir el ejército.
Según las teorías clásicas, los salarios se regulan según factores externos al sistema (población). A estas teorías, Marx incluye el empleo industrial y al ejército de reserva. Lo que en definitiva viene a explicarnos Sweezy en este capítulo, es que según Marx, el ejército de reserva es formado mediante las innovaciones tecnológicas para economizar trabajo, y gracias a este, puede sobrevivir la plusvalía y la clase que ella sostiene. Además, a este respecto Sweezy destaca la idea errónea de suponer que la acumulación o bien la introducción de las máquinas para ahorrar trabajo marche a un paso igual, como para mantener un equilibrio entre los salarios y la plusvalía.

6. LA TENDENCIA DESCENDENTE DE LA TASA DE LA GANANCIA.

Paul M. Sweezy presenta en este capítulo la Ley de la tendencia descendente de la tasa de la ganancia que formuló Marx.
La formulación de la ley por Marx dice que la acumulación del capital va acompañada por una mecanización progresiva del proceso de producción. La misma cantidad de trabajo, con un equipo más perfeccionado y eficiente, puede rendir más y generar un aumento de los beneficios. Esto quiere decir que la productividad del trabajo crece de forma continuada. Y es que, para Marx, la tasa de ganancia es la fuerza impulsora de la producción capitalista. O dicho de otra forma, la composición orgánica del capital crece también sostenidamente. De ahí derivó Marx su “Ley de la tendencia descendente de la tasa de la ganancia”.
De este modo, si la tasa de la plusvalía es constante, la tasa de ganancia varía en sentido inverso a la composición orgánica del capital. Pero esto puede ser una mera tendencia, puesto que los cambios son imprevisibles y pueden balancear o modificar los efectos sobre los mismos.
Existirán ciertos obstáculos internos opuestos al desarrollo de la producción capitalista, como expuso Marx, una composición orgánica ascendente del capital expresa la creciente productividad del trabajo; y la tasa descendente de la ganancia que la acompaña tiene que cerrar al fin los cauces de la iniciativa capitalista.
Las causas contrarrestantes.
Marx se centra en cinco de las seis causas que contrarrestan y anulan la “Ley general de la tasa descendente de la ganancia” (quedando esta en una mera tendencia):
1ª. Abaratamiento de los Elementos del Capital Constante. El uso creciente de maquinaria, eleva la productividad de trabajo, lo que disminuye el valor por unidad del capital constante.
2ª. Aumento de la Intensidad de Explotación. Se trata de producir más en menos tiempo, sin afectar la cantidad de trabajo necesario, a través de los mecanismos de acelerar y estirar la jornada, lo cual eleva la tasa de ganancia.
3ª. Depresión de los salarios más abajo de su valor. Esto está determinado más por el mercado que por la voluntad de los capitalistas.
4ª. Sobrepoblación relativa o “ejército de reserva”. La existencia de trabajadores desocupados conduce a la creación de nuevas industrias con una composición orgánica del capital relativamente baja y una tasa de ganancia relativamente alta.
5ª. Comercio exterior. Abarata la adquisición de materias primas y artículos necesarios, frente a la producción nacional.
Una crítica de la ley.
Es importante destacar también la existencia de otras fuerzas, además de las mencionadas hasta ahora, que son significativas a este respecto. Tales fuerzas pueden ser clasificadas en aquellas que tienden a deprimir la tasa de la ganancia y aquellas que tienden a elevarla.
Fuerzas que tienden a deprimir la tasa de la ganancia:
- Los sindicatos. Los trabajadores en reserva son el principal obstáculo para los trabajadores que quieren beneficiarse del desarrollo industrial, por eso se organizan en sindicatos.
- La acción del estado en beneficio de los trabajadores. Leyes que benefician a los trabajadores, e igualmente a los sindicatos ayudan a la depresión de la tasa de la ganancia.
Fuerzas tendientes a elevar la tasa de la ganancia:

- Organizaciones patronales. Actúan para mejorar la posición contractual del capital frente al trabajo, ejerciendo una influencia ascendente en la tasa de la ganancia.
- Exportación del capital. Sirve para mitigar la presión sobre el mercado de trabajo doméstico e impide la depresión sobre la tasa de la ganancia.

- Formación de monopolios. los capitalistas lo crean para aumentar su tasa de ganancia
- Acción del estado en beneficio del capital. Tienen el efecto de elevar la tasa de la ganancia general.

8. LA NATURALEZA DE LAS CRISIS CAPITALISTAS
En este capítulo Marx nos habla de las crisis económicas. Para empezar, explica una transición de las formas de transacción del trueque M-M (Mercancía contra Mercancía), a una forma de cambio M-D-M (Mercancía contra dinero y dinero contra mercancía), en las nuevas condiciones de una economía desarrollada. Con la aparición de la moneda, le permite al productor vender su producto cuando éste terminado y con el dinero puede hacer lo que a el le plazca. De este modo se ahorra mucho tiempo y ayuda a la especialización, que es la base de la productividad incrementada.
Ahora bien, este medio de cambio privado introduce la posibilidad de crisis de una índole nunca sospechada en una economía simple, en la que el trabajo estuviera organizado y los productos fuesen compartidos bajo la dirección de una sola autoridad. Si falla un comprador-vendedor, se produce una crisis en cadena pudiendo afectar a toda la economía. La consecuencia es que coinciden existencias de mercancías invendibles y necesidades insatisfechas. Cada productor ha producido más de lo que puede vender y se ha dado pues, una crisis de sobreproducción. Pero la sobreproducción no es la causa de la crisis, sino el resultado de ella. Hay que buscar las causas en la interrupción de la cadena compra-venta.
Hay dos tipos de crisis: las relacionadas con la tendencia descendente de la tasa de la ganancia y la crisis de realización (realización de valor). Desde el punto de vista del análisis causal, los dos tipos de crisis plantean problemas diversos. En un caso tiene que ver con movimientos en la tasa de la plusvalía y en la composición del capital, quedando intacto el sistema de valor; y en el otro, tenemos que ver con fuerzas todavía no especificadas que tienden a crear un déficit general en la demanda de mercancías, en el sentido de ser insuficientes para comprarlas todas con una tasa de ganancia satisfactoria. El punto de partida de la crisis es en ambos casos un descenso en la tasa de la ganancia; pero lo que está detrás del descenso en la tasa de ganancia en un caso, requiere un análisis muy diferente del que requiere lo que está detrás del descenso en la tasa de ganancia en el otro.

Tras haberse rehabilitado entrara a prisión por un delito de hace seis años!!


Con sólo 16 años, David comenzó a consumir hachís a las puertas del colegio. Después llegó la adicción a la heroína. Durante los años en los que las drogas dominaron su vida, fue encarcelado por delitos menores. Los cometía, afirman quiénes lo conocen, como consecuencia de su toxicomanía. 

Pasado el tiempo, en 2006 la Policía lo sorprendió con una papelina de heroína. La Sección Quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en Vigo, lo condenó a tres años y medio de cárcel y suspendió su ingreso en A Lama condicionado a que no volviese a consumir. Pero recayó. En 2009. "Y la Policía me cogió con otra papela", recordaba ayer David. Y esto se tradujo en otra pena de tres años y medio de prisión a la que se unió la anterior. "Entro en la cárcel por menos de medio gramo de heroína", añade este vigués, en la actualidad ya rehabilitado. "Llevo más de tres años sin consumir y colaboro con asociaciones que luchan contra la droga", relata. Para él, su caso es "una injusticia". "Está fuera de lugar que el Estado gaste dinero en rehabilitarnos y que cuando lo consigue, nos mande a la cárcel; es una contradicción; me van a destrozar la vida", lamenta.

David hacía estas manifestaciones ayer por la mañana a las puertas de los juzgados de Vigo, a donde acudió acompañado por su padre, otros allegados y miembros de la plataforma que lucha para que se haga justicia y se le conceda el indulto. Hubo una concentración ante el edificio de la Audiencia, a donde este exdrogodependiente acudió a recoger los mandamientos de prisión de las dos condenas, un último trámite angustioso para él antes de ingresar en A Lama. Entre los asistentes estaba Chelo Martínez, diputada de AGE, quién anunció que se presentará una iniciativa en el Parlamento gallego con el objeto de que se apoye el indulto para este vigués. También se instarán iniciativas similares en el Concello vigués y en el parlamento español. - igual que por la mañana en los juzgados, por la tarde los allegados y también integrantes de asociaciones y partidos políticos arroparon al afectado en el penal de A Lama.

Los familiares de este vigués afirman que están desesperados. Su padre(invidente), que fue el primer guía turístico de Galicia, considera "lamentable" que su hijo tenga que ingresar en prisión pese a estar ya rehabilitado. Su madre también lo está pasando muy mal. "Estoy destrozada, no tengo fuerzas para hablar...; doy las gracias a todos los que están luchando por mi hijo", afirmaba ayer en su casa entre lágrimas en conversación telefónica.




Personalmente considero que todas las personas que cometan un delito han de pagarlo, pero a su debido tiempo. 

Las cárceles del siglo XXI no son el mejor sitio para rehabilitarse cuando eres drogodependiente, es más, en las cárceles españolas es mucho más fácil conseguir la droga dentro que fuera en la misma calle. Por lo tanto tras conocer el caso de David y sabiendo que ha conseguido dejar de consumir, además de que ayuda (trabaja en un ONG) a gente que se encuentra en las mismas condiciones que él hace unos años creo que es no es difícil conceder el indulto que tanto él como su familia no han cesado de pedir. En este país se conceden indultos todos los días con una gran facilidad, por lo tanto creo que no deben demorar aquel que dará la paz a esta familia.

La drogadicción es una enfermedad que no solo sufren los que la padecen sino también todo aquel que rodea a la persona, puedes rehabilitarte pero es una enfermedad de por vida, y puesto que es muy difícil salir de ese túnel negro debemos ayudar a todas las personas que lo logran.

Esperemos que los juzgados de Vigo no tarden en emitir la noticia de la concesión de indulto para David Reboredo.


martes, 27 de noviembre de 2012

SIN PELOS EN LA LENGUA










Después de la polvareda desatada en las redes sociales a cuenta de lo "feos" que eran los manifestantes que salían a protestar a las calles en su intervención en El Gato al Agua de Intereconomía, este sábado pasado el actor Arturo Fernández se convirtió en una de las estrellas invitadas en El Gran Debate de Telecinco. Y no defraudó a los curiosos que se quedaron a verle hasta tarde.

Fernández se dejó caer por el programa de Jordi González para analizar sus polémcias palabras sobre que en las manifestaciones indignadas sólo se ve a gente fea y terminó metiéndose en nuevos jardines. 

Eso sí, quiso dejar claro que "lo he dicho todo en clave de humor y ciertas personas no lo han entendido así". Ya que estaba se metió de lleno en cuestiones política asegurando que "yo he dicho que la izquierda nunca perdonaba a la derecha y España nunca jamás ha prosperado cuando ha gobernado la izquierda". Más aún, destacó, "con Felipe González se quedó este país con cuatro millones de parados, Aznar lo dejó con 1.800.000, y con Zapatero hubo cinco millones y una hecatombe espantosa con la que se ha encontrado Rajoy".

Por eso consideró que "no se le puede exigir a Rajoy que solucione esto de la noche a la mañana. Es imposible. Él no sabía el desastre tan espantoso con el que se iba a encontrar. Pero tenemos un Gobierno con un equipo como pocos podíamos tener y Rajoy es un hombre muy experimentado, muy capaz y un hombre honrado. La maquinaria es lenta, pero cuando se es lento no puedes equivocarte".

A su juicio, "la crisis se ha notado en el teatro, pero yo no he subido los precios con la subida del IVA. Hay que arrimar el hombro y ahora mantengo los mismos precios de hace dos años, porque no quiero agravar la situación de las personas, quiero que sea asequible el precio de la entrada".

Es por eso que piensa que "la huelga ha sido una auténtica vergüenza. Yo lo he visto por televisión y no daba crédito al vandalismo, que es algo que no podemos tolerar. No son feos exteriormente, sino interiormente también", remachó para añadir que "quien ha patrocinado la huelga son los sindicatos, que están indignados porque Rajoy les ha quitado el 40% de sus subvenciones. Esa es la única razón por la que han hecho una huelga. Ha sido una guerra, y no otra cosa". 

Genio y figura, Arturo Fernández aventuró que "nos hemos convertido en un país de cobardes. Hay que confiar en el Gobierno que todos hemos elegido y dejarlo actuar. La izquierda tiene miedo porque sabe que hay un buen Gobierno. Y a la izquierda le digo que está vieja".

No obstante, matizó al afirmar que "si alguien se ha enfadado por lo que dije, pido perdón. Fue un tono de broma y pido disculpas a quienes se han ofendido, pero me refería sólo a esa primera fila".

En otros temas, el actor asegura que "en España debería haber sólo dos partidos, ya que en cada barrio te salen tres partidos y te gastan muchísimo dinero".



Pienso que Arturo Fernández es un GRAN SEÑOR pero también humano, por tanto tiene derecho a errar y rectificar. Este actor del panorama español cada vez que lleva a cabo una nueva obra de teatro tiene como regla no pedir subvenciones y apuesta por exponer su capital.
De todo lo que expuso el pasado sábado no comparto la idea de que en España solo debería existir el bipartidismo puesto que en gran parte la situación en la que nos encontramos actualmente es consecuencia de ello, además creo que al afirmar que se deberían dejar de lado las ideología políticas y arrimar el hombro para sacar al país de la crisis se está contradiciendo. 
Comparto la idea de que la izquierda nunca perdonara a la derecha debido al trasfondo histórico que existe detrás pero he de decir que España en cuestiones y reformas sociales generalmente  ha prosperado más con un  gobierno de izquierdas.
Creo que todos estamos de acuerdo en que "no se le puede exigir a Rajoy que solucione esto de la noche a la mañana” pero tampoco podemos escudarnos en que la culpa de la decadencia del país es de otros ya que cuando el acepto el cargo de Presidente del Gobierno era para resolver la situación actual y no para seguir con el enfrentamiento perpetuo de la derecha y la izquierda. Este país necesita soluciones no excusas como vienen dándose de ambos partidos. Y comparto con Fernández la idea de que económicamente los gobiernos de derechas saben desenvolverse mejor.
Actualmente mucha gente de la generación de este actor  comparte la idea de que en la dictadura ´”tampoco se vivía tan mal”, pero creo que debido a la diferencia cultural se olvidan de un pequeño detalle: LA LIBERTAD.
Finalmente solo debo decir que si de algo me avergüenzo es de aquellos que dicen luchar por los interés de los trabajadores (los sindicatos). Probablemente a finales del siglo XIX y principios del XX  (primera y segunda revolución industrial) si fueran útiles pero actualmente como pasa con todos aquellos que consigue poder se han convertido en “perros viejos” y esas huelgas que convocan para salvaguardar los derechos de los “curritos” hacen que estos se vean perjudicados. En épocas de crisis, donde casi seis millones de personas no tienen trabajo la solución no creo que este en dejar de ir a trabajar, pero si veo necesario la manifestación masiva de la población, es decir, salir a las calles y hacerte oír. 

lunes, 12 de noviembre de 2012

Música y Actualidad

Reflejo de una sociedad que se desmorona convertida en letra de canción.

Bajo la Luna y bajo el Sol,
no estamos creyendo en su sistema de control
No estamos creyendo y todo parece corrupto
No creo en el que vendió sus ideales pa ser un producto

No estamos creyendo en gangsta o en matón,
no estamos creyendo en badbwoy de carton!
So, we go fi dem!
No estamos creyendo en cada religión,
no estamos creyendo en manipulación!
So, we go fi dem!
Pa quemar a cada violador again!
Pa quemar al pederasta y a maltratador también!
Pa quemar al que experimenta con animal, again!
No creer en ese mal y hacer el bien!
So, we go fidem!
Atiende! Casi todos mienten!
No estamos creyendo en alcalde ni presidente
No estamos creyendo en los que venden a su pueblo y a su gente
No estamos creyendo en delincuentes!
We go fi dem!
No estamos creyendo en el hambre,
no estamos creyendo en el negocio de diamantes
No estamos creyendo en explotar o maltratar al inmigrante!
No estamos creyendo que esto aguante!
We go fi dem!
No creo en dem! dem!, no creo en leyes
No creo en bling bling!, digo no creo en reyes
No creo en nada que me diga la gente!
Mentiras, codicia, egoísmo… lo mismo de casi siempre
No! No creo! No creo en mísero y feo trofeo
el peor Orfeo, ves la miseria que al hombre rodeó
No creo más que en agua, fuego, tierra y aire
No creo en guerra, ya no estoy creyendo en nadie
Yeh! Tanta mentira en el mundo
que no me fío del rumbo que toma, el coma profundo
Segundo a segundo se hunde Natura,
mas no encontró cura
a la dura rotura del puto infame sistema rotundo
Segundo plano, nada es en vano,
soy el reclamo, la voz del barrio, el mundo al que am
nos llamó Hermano, la libertad sin mi ayuda,
ya que no creo en Selassie, Cristo, Jehovah ni Buda!

Bajo la Luna y bajo el Sol,
no estamos creyendo en su sistema de control
No estamos creyendo y todo parece corrupto
No creo en el que vendió sus ideales pa ser un producto

Bajo la Luna y bajo el Sol,
no estamos creyendo en su sistema de control
No estamos creyendo en lo que no parece justo
Si no crees en nada, más fácil será para evitar el susto

No creo en globalización, ni en civilización
Tengo la sensación de que todo es invención
Con montones de mentiras crean ilusión
Una mención especial pa la televisión
Sé que ya no hay opción ni marcha atrás,
demasiada maldad camuflada tras un antifaz
De lo que oigo a diario creo en la mitad,
vivo y desvivo buscando la verdad
Por eso canto, canto, canto
para que la gente sepa que no me están engañando
Si quieres sigue tú al rebaño, con eso no me apaño
Ya me contarás en unos años,
cuando comiencen los daños
lo adelanto yo, que no estamos creyendo, no!
Ni en los diarios, ni en las radios ni en su promoción
No creo que nadie en este mundo tenga la razón,
Ni Karty, ni Rapsus, ni Swan Fyahbwoy

No creo en boca de bling bling, ni de calibre
No estamos creyendo en el que no deje ser libre
No creo en líderes y no creo en el rey,
creo en Karty, creo en Fyahbwoy y creo en Rapsusklei!

Y la verdad creo yo que están pallá!
Y de eso he venido a hablarte con el Swan Fyahbwoy!
No creo en lo que dice pantalla,
para parar el labba labba cara al más allá!

Que no hagan que me confunda,
creeré en su tumba y créeme que la haré profunda!
Si mi noción se secunda,
te aseguro que hablaremos de una realidad rotunda

Óyeme Swan, por qué va tan mal el mundo?

No lo sé Rapsus, anda perdido y sin rumbo!

Tú sabes, fren, se pone chungo el asunto!

No sé qué pasará, siempre me lo pregunto!

Bajo la Luna y bajo el Sol,
no estamos creyendo en su sistema de control
No estamos creyendo y todo parece corrupto
No creo en el que vendió sus ideales pa ser un producto

Bajo la Luna y bajo el Sol,
no estamos creyendo en su sistema de control
No estamos creyendo en lo que no parece justo
Si no crees en nada, más fácil será para evitar el susto


                                      SWAN FYAHBWOY "NO ESTAMOS CREYENDO"

lunes, 5 de noviembre de 2012

. Confunde ser testigo ocular con la interpretación de la realidad.

Hoy en dia la teoría de las televisiones es que basta con llevar nuestros ojos al sitio de la noticia y recoger con el micrófono el testimonio de un tipo que pasa por alli para comprender los acontecimientos,el objetivo no es hacernos comprender una situación, sino hacernos asistir a un acontecimiento.
  
Igual que los medios de comunicación gustan de presentarse como un simple reflejo de la realidad en cuanto a su cobertura informativa, cuando opinan o editorializan intentan hacer entender a los ciudadanos que esa opinión o posición ideológica sólo es un reflejo del sentir mayoritario, “un clamor”, como suelen señalar con frecuencia. Se trata de un claro ejemplo de cobardía intelectual y de engaño a la audiencia, puesto que no lo anuncian como su propio ideario o propuesta política, sino que intentan hacernos creer que es la ciudadanía quien participa de esa posición y demanda acciones, sin que existan elementos informativos rigurosos que se sostengan.  Por ejemplo el diario español El Mundo tiene una sección que denomina Vox populi, allí seleccionan figuras públicas que bajan o suben. Pero en la selección no consultan a nadie para detectar esa “voz popular”, simplemente aplauden o silban, en nombre de toda la sociedad, a los personajes que ellos deciden.

COMENTARIO DE LA LECTURA ELEGIDA PARA ECONOMÍA: 1984




 George Orwell (Seudónimo de Eric Blair; Motihari, India, 1903 - Londres, 1950) es un escritor británico.  Formó parte de la Policía Imperial Inglesa en Asia.Vivió varios años en París y en Londres, donde conoció la pobreza; sus experiencias como colaborador de los republicanos en la Guerra Civil española (Orwell era socialista) las recogió en su interesante libro Homenaje a Cataluña (1938). Durante la Segunda Guerra Mundial formó parte de la radio inglesa. En 1943 entró en la redacción del diario Tribune.
En general, toda su obra, incluida esta primera etapa y las posteriores sátiras distópicas, reflejaron sus posiciones políticas y morales, pues subrayaron la lucha del hombre contra las reglas sociales establecidas por el poder político. Sus títulos más populares son Rebelión en la granja (1945) y 1984 (1949), ficciones en las cuales describió un nuevo tipo de sociedad controlada totalitariamente por métodos burocráticos y políticos.

 La obra de George Orwell 1984 (escrita en 1949) ha significado para mí  un gran descubrimiento en cuanto a novela se refiere. Sinceramente no soy muy aficionada a leer pero en cuanto vi la lista de títulos que podíamos escoger para realizar el trabajo no dude ni un minuto en decantarme por ella.
El pasado año, los dos profesores que tuve en asignaturas relacionadas con temas políticos mencionaron la obra de Orwell con tanto énfasis que me despertó la curiosidad. Además he de confesar que siento debilidad con todo aquello que este relacionado con los regímenes totalitarios. Me parece realmente apasionante como una dictadura totalitaria puede llegar a controlar la mente de las masas de tal forma que consigue deshumanizarlos y despojarles de todo sentimiento de afecto que puedan expresar hacia otra persona.

En la lectura creo que existen cuatro frases claves para entender como funciona la dictadura totalitaria del superestado de Oceanía.

La primera: “la guerra es la paz” nos quiere dar a entender que la guerra es una garantía para controlar a las masas y que la clase gobernante se perpetúe en el poder, es decir, como en dicho superestado la guerra es algo continuo (contra enemigo existente o inventado por el líder) genera cierta tranquilidad para gobernar su estado como un mundo aparte. Además las continuas guerras debilitan tanto física como mentalmente a la población dejándoles mucho mas expuesto a la policía del pensamiento, para que esta pueda manipular su mente y elimine de ella toda forma de pensar que no sea la del partido.
Estas guerras además eran utilizadas para librarse del excedente producido para mantener el mismo nivel de pobreza para evitar una posible sublevación en contra del Gran Hermano.

La segunda: “la ignorancia es la fuerza” deja ver que en esta sociedad el nivel cultural era mínimo, es decir, el estrictamente necesario para que llevaran a cabo las actividades que el partido necesitara. La opinión de la masa es indiferente y toda aquella persona que destacar (crimen mental) era inmediatamente vaporizada por el Gran Hermano. Las personas tienen que autoconvencerse de que la única verdad es la del partido.

La tercera: “la libertad es la esclavitud” hace referencia a que  la masa encargada de trabajar para el Gran Hermano durante amplias jornadas son los “libres” pese a estar observados y escuchados las 24 horas del día, mientras que los propios miembros del partido, aquellos que viven por y para el Gran Hermano y hacen que se cumplan todas las normas carecen de libertad alguna ( de cara a la galería estas personas tiene que reafirmar todo aquello que beneficie al Gran Hermano pero a la hora de la verdad estas personas pueden apagar las pantallas y dejar de ser observados).

La cuarta: “El que controla el pasado, controla también el futuro. El que controla el presente, controla el pasado”. Es obvio que el pasado existe gracias a los documentos que se van guardando y a las memorias de los hombres, de tal forma que si conseguimos modificar los documentos (trabajo que realiza Winston en el Departamento de Registro) y poco a poco ir miando todo posible pensamiento del ser humano, conseguiremos controlas el pasado.
He de decir que como bien pasa en la obra, hasta cierto punto es fácil hacerse con el control del pasado a través de los documentos pero si hay algo que resulta realmente difícil es despojar al hombre de su pensamiento. El razonamiento es lo que nos distingue del resto de los animales y nos hace libres, por ejemplo cuando una persona se encuentra encarcela la única posibilidad de rozar la libertad es viajar por su mente y evadirse por un momento de la realidad, por lo tanto veo imposible que nunca nadie se pueda apoderar del control del pensamiento.

 Por otra parte me llama mucho la atención como se concibe la sexualidad en la obra. El Gran hermano tiene como objetivo erradicar todo sentimiento de compasión, empatía y amor sustituyéndolos por el de odio, ira y desconfianza.
Para poder llevar a cabo este proceso es imprescindible modificar el concepto de familia que se tiene hasta ese momento. A partir de ahora las relaciones entre los diferentes miembros del partido tendrá como fin el engendrar hijos, llegando a percibir el sexo como algo incómodo que es necesario hacer por el bien del Gran Hermano.
La educación que imparte el Ministerio de la Verdad hace que los niños lleguen a delatar a sus padres por ser culpables de crimen mental.

Recomiendo la obra a todas aquellas personas que estén interesadas en temas relacionados con los totalitarismos. Es realmente interesante la forma en la que El Gran Hermano despoja a los hombres de sus valores y sentimientos con tal de que el partido continúe gobernando.
Para todas aquellas personas que amen los finales felices he de confirmar que este no es su libro, lamentablemente Wiston y Julia no viven felices y comen perdices, más bien se convierten en meras “máquinas” al servicio del partido tras numerosas torturas.